Serigrafía

La serigrafía es una de las técnicas de estampación más demandadas por el público, ya que sirve tanto para estampar textos como imágenes y sobre cualquier tipo de superficie o material. Desde Garrampa somos especialistas en esta técnica de personalización, así que si te preguntas qué es la serigrafía, has llegado al lugar indicado. Descubre una técnica no solo utilizada en el ámbito industrial, sino también en el artístico. Si te preguntas cómo hacer serigrafía, cuál es su proceso para llevar adelante esta técnica de estampación, desde Garrampa te contamos que consiste en transferir una tinta, gracias a una malla tensada y dentro de un marco. Las estampaciones en serigrafía más comunes se realizan en artículos como camisetas, mochilas, sudaderas o bolsas, entre otros. Es el primer paso del proceso de la serigrafía en camisetas o cualquier otro producto. En primer lugar, hay que realizar la preparación del fotolito y la separación de colores del diseño. Y es que cada pantalla de serigrafía va a llevar un color por separado que se deben imprimir en un fotolito. Estos pueden ser de diferentes materiales, siendo los más habituales las transparencias fabricadas en poliéster translúcido. El fotolito siempre se imprime en un negro muy opaco y no puede contener grises, ya que estas tonalidades se pueden simular con tramas y medios tonos con programas de retoque fotográfico. Una vez impresos los fotolitos realizamos la preparación de la pantalla de serigrafía, que consiste en un marco de madera o de metal con una malla de poliéster. Sobre esta malla se aplica una emulsión fotosensible por las dos caras y se deja secar. Cuando se seca la pantalla de serigrafía, está lista para poderse utilizar. Acto seguido, se coloca el fotolito impreso sobre la pantalla de serigrafía y este pasa a la insoladora donde se le aplicará luz durante un tiempo determinado. Más tarde, cuando la pantalla queda expuesta a la luz, se revela aplicándole agua directamente. Recuerda que por medio de este proceso de revelado, las partes negras del fotolito, al aplicarle agua, la emulsión se separa quedando una máscara por donde puede pasar la tinta. El proceso se repite para cada color del diseño, puesto que cada tono debe ir en pantallas diferentes. A continuación, una vez secado el diseño, se introduce en la máquina de serigrafía o pulpo de serigrafía, y se precintan los bordes del marco para facilitar la limpieza de la tinta sobrante. Esta tinta se añade sobre la pantalla y se coloca la prenda a estampar debajo de la misma y sobre una tabla. Para desplazar la tienda aplicada, se emplea una racleta, que lleva una escobilla de goma para facilitar el deslizamiento de la tinta sobre la pantalla, y se habrá depositado sobre la prenda. De nuevo, si el diseño tiene varios colores, este proceso se realiza con cada color por separado hasta que se estampan todos en la prenda serigrafiada. Una vez que se han estampado todos los colores, se introduce la prenda en un horno especial donde la tinta pasa por un proceso de curado para asegurar la fijación de la tinta a la prenda. La temperatura de curado variará en función del tipo de tinta y el material de la prenda a estampar. La impresión en serigrafía hay que realizarla sobre superficies planas. El proceso de estampación se realiza mediante una pantalla con una malla que se tensa alrededor de un marco rígido. Las áreas de la imagen que no se van a imprimir se enmascaran, creando una plantilla con el diseño. Para realizar la estampación con la plantilla, esta se coloca sobre el artículo que va a ser personalizado. Además, en la malla de la pantalla se coloca la tinta, y con una escobilla de goma, se presiona la tinta a través de la pantalla, la cual se levanta suavemente para evitar cualquier mancha. La tinta se deja secar al aire o curado en función del producto y del tipo utilizado. El proceso es ideal para los colores planos y sin variación de tonos. Existen diferentes tipos de serigrafía, todo va a depender del diseño y los colores que se desean imprimir. A continuación, te explicamos los diferentes estilos de impresión para serigrafiar camisetas y si tienes cualquier otra duda, nuestro equipo comercial te la resolverá encantado. El plastisol: Se trata del estilo más tradicional de esta técnica de impresión. Funciona en todo tipo de tejidos, produce tonos brillantes y es perfecto para combinar colores. Su inconveniente es que el resultado final puede parecer algo pesado y resultar menos transpirable. Tampoco es muy recomendable para impresiones con multitud de detalles. Las tintas a base de agua o waterbase: Estas tintas se caracterizan por su compromiso sostenible, respetan el medio ambiente y son fáciles de limpiar. El agua se mezcla con un colorante o pigmento y después se evapora cuando la impresión se seca. En este tipo de técnica, el color de la prenda influye en la impresión. Por ejemplo, una tinta de color rojo brillante sobre una camiseta negra se transformará en un rojo muy oscuro, aportando una apariencia vintage. Sin embargo, en prendas blancas o de colores claros que utilicen tintas oscuras, el resultado es perfecto. La técnica de descarga: Esta es la más idónea para serigrafiar camisetas oscuras. Cabe destacar que el resultado es todavía mejor en prendas de algodón 100%. La desventaja de este tipo de técnica serigráfica es que no hay una garantía de que los colores salgan exactamente cómo tú deseas. La técnica de serigrafía híbrida: Esta varía en función del tejido de la prenda, su color, el diseño que se quiera plasma y las tonalidades del mismo. Un buen profesional de la serigrafía con experiencia y una avanzada tecnología puede conseguir un resultado suave, brillante, preciso y de la máxima calidad.