A pesar de la naturaleza exigente del trabajo, muchas enfermeras, médicos y auxiliares se ponen sus uniformes sanitarios personalizados y siguen trabajando durante el embarazo, a veces, incluso hasta el momento en que rompen aguas. Sin embargo, el hecho de que muchas enfermeras quieran trabajar durante el embarazo no significa que no haya desafíos ni preocupaciones.
Hay que dejar claro que lo recomendable es coger la baja cuando estás embarazada, pero si has tomado la decisión propia de trabajar, te vamos a dejar 20 consejos agrupados en 5 categorías para ayudarte a ti y a tu bebé a tener el embarazo más seguro y fácil posible, incluso mientras continúas trabajando.
Programación y horarios de trabajo
1- Busca trabajar menos de 8h.
Si su lugar de trabajo lo permite, algunas médicos y enfermeras tratan de ajustar su horario para que trabajen turnos más cortos en lugar de estar de pie durante 8 horas seguidas. Mientras que a algunas enfermeras les encanta estar de pie y caminar y dicen que ayuda a que el bebé se caiga, otras encuentran que los turnos de 8 horas las dejan completamente cansadas y a veces con dolor.
2- Prioriza el turno de día en vez del nocturno.
A algunas embarazadas les gusta tener turnos de día porque tienen problemas para trabajar durante la noche y dormir durante el día. Otras personas son como búhos y prefieren trabajar en el turno de noche. No hay una respuesta correcta o incorrecta ante esto, pero si puedes, elige el horario de turnos que mejor se adapte a sus patrones naturales de sueño para que pueda descansar verdaderamente cuando esté fuera de servicio.
3- Vea si el servicio ligero es una opción.
Aunque no todos los hospitales tienen la opción, a veces las enfermeras y auxiliares de enfermería intentan realizar tareas ligeras, como labores de gestión y llevar a cabo auditorías o supervisiones, en lugar de levantar pacientes pesados y realizar otros trabajos que requieren más esfuerzo. Incluso si tu hospital no ofrece funciones oficiales de trabajo liviano, a veces los compañeros de trabajo son tus aliados. Una vez más, esto depende completamente de las instalaciones y del trabajo, por lo que, si su médico le ha recomendado que coja la baja, no lo ponga en duda y no realice esfuerzos innecesarios.
4- Vaya a tiempo parcial o empiece a trabajar temprano.
Si sus instalaciones no pueden acomodar turnos más cortos o trabajo liviano, algunas reducen sus horarios a tiempo parcial.
Ropa y calzado sanitario
5- Escoja zapatos con soporte.
Un buen par de zapatos puede ayudar a evitar el dolor de pies, piernas y espalda durante el embarazo al pararse y caminar durante 12 horas seguidas. Busque zapatillas o zuecos de enfermera que ofrezcan una buena sujeción del arco y un diseño bien acolchado, así como suelas antideslizantes para evitar caídas. También busque zapatos que usen telas que absorban la humedad o que de otra manera ventilen el sudor y el calor para que sus pies se mantengan frescos y secos.
6-Invierta en calcetines de compresión.
Las mujeres embarazadas usan calcetines de compresión incluso si no son enfermeras, y las enfermeras usan calcetines de compresión incluso cuando no están esperando. Así que, si eres una enfermera embarazada, definitivamente necesitas usar calcetines de compresión, los cuales estimulan la buena circulación, reducen la hinchazón y ayudan a combatir el dolor de pies y piernas. Acompaña estos calcetines con un pantalon sanitario cómodo, que facilite trabajar.
7- Compre uniformes médicos cómodos.
Lo más probable es que ya se sienta lo suficientemente incómoda durante el embarazo, por lo que debe buscar telas que absorban la humedad en cortes cómodos. Una vez su tripa comience a ser notable, tendrá que invertir en un par de uniformes de maternidad para acomodar a su pequeño en crecimiento. Es importante elegir una bata médica personalizada que se ajuste a tu nueva talla y necesidades.
Comunicación
8- Hable con sus superiores
Aunque no es obligatorio comunicar el embarazo en una fecha concreta, sí que es recomendable hacérselo saber a sus jefes para reducir los riesgos del embarazo, y más trabajando en el ámbito de la salud con pacientes enfermos.
9- Hágaselo saber a sus compañeros de trabajo.
Del mismo modo, también tendrá que notificar a sus compañeros de trabajo la buena notica. Si usted trabaja en una unidad de apoyo, sus compañeros de trabajo pueden ser de gran ayuda durante su embarazo, ya que no tendrá que mover a pacientes sola y serán ellos quien le ayuden a lo largo de la jornada laboral.
10- Manténgase en comunicación constante con su médico.
Lo ideal es que su médico sea su defensor y su pareja durante todo el embarazo; por lo tanto, si cree que los cambios en la lactancia pueden estar causando dolor o complicaciones durante el embarazo, no tenga miedo de hablar de ello con su médico. Del mismo modo, si su médico le recomienda trabajo ligero, permiso anticipado u otras restricciones laborales, comuníqueselo a su jefe y a sus compañeros de trabajo.
Alimentos y bebidas
11- Beba mucha agua
Ya sabes que hay que estar bien hidratada incluso cuando no está embarazada, y beber suficiente agua sólo se vuelve más crítico durante el embarazo. Después de todo, la hidratación puede ayudar a prevenir el estreñimiento, las hemorroides, la hinchazón excesiva, las infecciones del tracto urinario o de la vejiga. Se recomienda beber por lo menos a 10 vasos de líquidos al día, y su orina debe ser incolora o de color amarillo pálido si se mantiene adecuadamente hidratada.
12- Usa el baño siempre que puedas.
Hablando de orina, es una verdad universalmente reconocida que las mujeres embarazadas necesitan ir al baño con bastante frecuencia. Desafortunadamente, como enfermera, tendrás algunas restricciones sobre cuándo poder ir al baño: No puedes detenerte en medio de tratar a un paciente. Esto hace que sea doblemente importante aprovechar cualquier descanso que tenga y usar el baño siempre que pueda.
13- Lleva tus propias comidas y bocadillos.
Siempre que sea posible, hazte tus propias comidas y llévalas al trabajo en un tupper. Con esto te asegurarás que estás recibiendo todos los nutrientes que tú y tu bebé necesitáis, además, siempre tendrás algo a mano para satisfacer cualquier antojo. A una mala, si no tienes tiempo para ir a la cafetería en tu turno, todavía podrás comer algo.
14- Ten a mano una bolsa contra las náuseas.
Usted puede guardar su comida en su bolsa de lactancia, pero con la comida pueden venir náuseas, por lo que se recomienda mantener un paquete anti náuseas justo al lado de esos sabrosos y nutritivos bocadillos. Asegúrese de tener galletas saladas y cualquier otra cosa que le ayude a controlar el vómito en caso de urgencia.
Salud
15- Considere su historial médico.
Cuando se trata de decidir cuánto tiempo va a trabajar, tendrá que tener en cuenta sus problemas de salud anteriores y embarazos anteriores, si es que ha tenido alguno. En según qué casos es recomendable la baja por embarazo de riesgo.
16- Tenga cuidado con los peligros potenciales.
Las enfermeras trabajan con pacientes enfermos que también pueden ser física y mentalmente inestables, lo que puede poner a las enfermeras en posiciones comprometidas incluso si no están embarazadas. Cuando usted está embarazada, debe estar muy atenta a una situación potencialmente dañina, como tratar a un paciente con un caso desagradable de neumonía contagiosa. Si su establecimiento cuenta con un equipo de control de infecciones, también puede hablar con ellos para que le asesoren sobre cómo mantenerlos a usted y al bebé a salvo de enfermedades durante el embarazo.
17- Tenga cuidado al levantar objetos pesados.
Usted probablemente ha escuchado que no debe levantar objetos pesados mientras está embarazada, lo cual incluye pacientes. Si bien es un mito común que levantar objetos pesados causa abortos espontáneos, puede lesionar su espalda porque el bebé en crecimiento ya ejerce mucha presión sobre sus músculos. Asegúrese de levantar con las rodillas mientras mantiene la espalda recta, y no dude en pedir ayuda si la necesita. Las mujeres en riesgo de parto prematuro también podrían necesitar dejar de levantar objetos pesados después del primer trimestre; hable con su médico si esto se aplica a usted.
18- Sepa que sus niveles de tolerancia pueden cambiar.
Las profesionales del mundo de la salud son conocidas por sus estómagos fuertes y a menudo se enfrentan a situaciones que involucran sangre, vómito y otros fluidos corporales que pueden volver verdes a otras personas. Sin embargo, no es ningún secreto que las náuseas, los vómitos y otros efectos secundarios desagradables son a menudo tan comunes durante el embarazo, especialmente durante el primer trimestre, y no son inmunes a esto. De hecho, algunas descubren que sus niveles de tolerancia cambian drásticamente durante el embarazo, y que no pueden completar las tareas que antes eran rutinarias sin que sus estómagos se agiten. Conozca sus límites, y si ciertas tareas le hacen vomitar sin falta, trate de limitarlos o evitarlos.
19- No te compares con las demás, ni siquiera con tus embarazos anteriores.
Cada embarazo es una experiencia individual, y ya sea que se trate de su primer hijo o de su quinto, compararse con otros no ayudará a nadie. Algunas enfermeras viven con su uniforme y trabajan hasta que rompen aguas, mientras que otras cogen la baja a las 30 o incluso 20 semanas. Sólo usted y su médico saben cuál es la opción correcta para usted, y esto puede variar de un embarazo a otro. Un embarazo puede ser sin dolor y sin complicaciones y usted puede trabajar hasta el final, mientras que puede sentirse enferma todo el tiempo en el segundo embarazo y tener que ausentarse del trabajo semanas antes…
20-Ponga a usted y a su bebé en primer lugar.
Como enfermera, su trabajo es promover la salud de sus pacientes, y como futura mamá, su trabajo es proteger su salud y la del bebé. Bajo ningún concepto debe sentirse obligada a trabajar o priorizar esto. Aunque usted pueda sentir lo contrario, siempre debe poner su salud y la del bebé en primer lugar para asegurar un parto seguro para ambos.
Trabajar como enfermera durante el embarazo es sin duda un reto, pero muchas enfermeras, médicos y auxiliares lo hacen todos los años y dan a luz a bebés sanos y felices. Nuestros consejos y estos consejos de Garrampa pueden ayudarle a mantenerse segura y cómoda mientras trabaja, pero si alguna vez siente que su trabajo como enfermera está comprometiendo su salud o la del bebé, hable con su médico para encontrar una solución.